▷ 15 Mitos y leyendas chilenas cortas para niños y adultos

Ya sean los gritos de la princesa Kora-llé cayendo hacia la Laguna del Inca, los cabellos rubios de la Pincoya o el movimiento del Caleuche en las noches sin luna. Cada una de estos mitos o leyendas chilenas forman parte de la cultura y tradición de Chile.

Aunque más de alguno dirá que son solo historias sin fundamentos, otros argumentaran que han escuchado el llanto del guerrero inca llorando a la princesa Kora en las frías noches de invierno.

Así que seas o no un creyente, déjate llevar por el misterio y misticismo de los mejores mitos y leyendas chilenas:

1. El Caleuche: El barco fantasma del sur de Chile

En las oscuras noches sin luna de los mares de Chiloé al sur de Chile, toma lugar uno de los mitos o leyendas chilenas más conocida por los marineros y pescadores del lugar: El Caleuche.

Algunos cuentan que es un barco de extrema belleza y gran tamaño que atrae a los náufragos y pescadores a su cubierta gracias a una hermosa melodía y luces que los hacen pensar que se está llevando una gran fiesta en el barco.

Al encontrarse en cubierta, los pobres desdichados son atraídos al camarote principal donde pueden degustar de un enorme festín pero con el paso del tiempo comienzan a reconocer que las demás personas en la fiesta no son de este mundo.

Es en ese momento cuando el capitán del Caleuche hace su aparición. Algunos dicen que es un brujo que no puede pisar tierra y por tal está destinado a navegar las aguas del sur de Chile por toda la eternidad. Mientras que otros dicen que fue un capitán maldito por su gran avaricia.

Brujo o no, lo cierto es que siempre está en busca de nuevos tripulantes para su preciada embarcación, por tal a los pobres náufragos siempre los rescata con el objetivo de ofrecerles riquezas inimaginables y cuando estos aceptan, se dan cuenta que todo fue un engaño y que tan solo han vendido su alma al capitán del Caleuche.

Los pocos que han logrado escapar del barco fantasma han caído en la locura pero aún si, en los escasos momento de claridad, logran describir a la tripulación del Caleuche como náufragos sin alma, que por alguna razón desconocida tienen una de sus piernas pegadas a su cuello y que son capaces de transformarse en otros seres marinos.

La historia del Caleuche y su capitán forma parte de las leyendas chilenas que todo chileno debe conocer y recordar que si algún día observa a un hermoso barco a través de la neblina de una noche sin luna… ¡más le vale correr!

2. Leyendas chilenas: La Pincoya

Con una larga cabellera rubia y piel clara pero un poco bronceada por el sol del sur de Chile. Es como los habitantes de Chiloé describen a la Pincoya, una hermosa joven que forma parte de los mitos y leyendas chilenas más antiguas.

Su historia comienza con la historia de “amor” entre sus padres, se dice que en una ocasión una muchacha de la zona de Cucao conocida como Huenchula se encontraba a las orillas del lago Huelde, cuando de repente un ser marino emergió de las profundidades y la secuestro.

Dicho ser marino no era nada menos que el Millalobo, el ser más poderoso de los mares chilenos. La leyenda dice que este ser marino fue el que condeno al capitán del Caleuche a navegar las aguas del sur de Chile por toda la eternidad.

Con el tiempo, Huenchula se enamoró del Millalobo y tuvieron una hija, la cual no podía ser vista por ningun ser mortal. Lamentablemente, en una ocasión cuando Huenchula regreso a visitar a su madre, esta no resistió la curiosidad y observo a su nieta. Al instante la hija del Millalobo y Huenchula se convirtió en agua cristalina.

Al verla transformada, Huenchula fue invadida por el llanto y la desesperación, cogió la vasija y corrió desesperada hacia la playa, a vaciar su contenido en las aguas del mar. Y luego, avanzando hacia el interior del océano, llamó a su esposo.

Entre sollozos y llantos, le relató lo acontecido con su hija. Apenas hubo terminado de pronunciar la última frase de su historia, vio emerger desde las aguas y acercarse hacia ella, una delicada barca semejante a una lapa, llevando en su interior a su desaparecida hija, convertida ahora en una hermosa joven, a quien dio el nombre de Pincoya.

Nace la leyenda

Desde ese entonces, el Millalobo decidio llevarse a toda su familia al fondo del mar para gobernar a todas las criaturas marinas con su ayuda. Se dice que poco después la Pincoya se casó con su hermano el Pincoy y ambos se encargan de cuidar el mar por su padre.

Los chilotes, especialmente los pescadores, cuentan en sus leyendas que cuando la Pincoya realiza su delicado baile hacia el mar, significa que en esos mares abundarán los peces y mariscos. Lo cual son buenas noticias para todo el pueblo.

En cambio sí lo hace hacia la tierra, generalmente debido a que los pobladores han cometido alguna falta en contra del mar, les indica que, para la temporada venidera, los mencionados productos escasearán y por tal motivo, será necesario salir en su búsqueda a playas y mares lejanos.

Otra tarea de la Pincoya es ayudar a los pobres náufragos a llegar a la orilla de algún puerto seguro pero si por alguna razón no lo logra y los náufragos fallecen, esta lleva sus cuerpos al Caleuche, en donde ellos vivirán como tripulantes por la eternidad.

Por último, un rasgo partícula de la Pincoya es que esta no tiene cola de pescado como todas las sirenas, esta logro mantener su forma humana.

Sin duda la Pincoya es una de las leyendas chilenas más importantes para los pescadores del sur de Chile.

3. La Laguna del Inca

Para esta leyenda chilena nos tendremos que alejar de los mares chilenos por un momento, ya que esta historia tomo lugar en lo alto de la cordillera de los Andes, en una zona conocida por el nombre Portillo.

La leyenda cuenta que en los años prósperos del imperio Inca (antes de que llegaran los españoles) existió un valiente y bravo guerrero conocido como Llli Yupanqui.

Yupanqui lucho largas y duras batallas y siempre salió victorioso, por tal razón fue reconocido entre los “hijos del sol” pero aburrido de no tener con quien compartir sus victorias se embarcó en la tarea de buscarse una esposa.

Al poco tiempo y gracias a su fama, Yupanqui logro conocer a una hermosa joven de ojos color esmeralda y que la mayoría señalaba como la mujer más hermosa de todo el imperio Inca de ese entonces.

Yupanqui no pudo resistir los encantos de la joven así que le ofreció su corazón y le pidió matrimonio. La joven, conocida como Kora-llé acepto sin pensarlo mucho ya que ser la esposa de un gran guerrero como lo era Yupanqui era un gran honor para ella y su familia.

El mito cuenta que ambos enamorados decidieron contraer nupcias en la cumbre de las montañas y las orillas de una linda laguna. En ese entonces los incas practicaban ciertas ceremonias antes de los casamientos para que sus dioses bendijeran la unión.

Kora-llé, con el ánimo de no ofender a sus dioses, solicito a sus sirvientes que le ayudaran a descender a la laguna para llevar acabo las ceremonias correspondientes. Pero lamentablemente el camino para descender era muy estrecho y empinado. No paso mucho tiempo para que la princesa tropezara y callera desde la cima de la montaña.

El gran guerrero llora a su amada princesa

Los gritos de dolor y desesperación de Yupanqui ante la impotencia de no poder despertar su amada princesa fueron tan fuertes que muchos de los presentes no resistieron y quebraron en llanto junto al gran guerrero.

Yupanqui decidió entregarle el cuerpo de su amada a la laguna para completar las ceremonias matrimoniales que dicha princesa había comenzado. La leyenda cuenta que la laguna al recibir el cuerpo de tan hermosa dama, cambio el color de sus aguas por un color esmeralda, idéntico al color de los ojos de la joven.

En la actualidad, la laguna es conocida como Laguna del Inca y algunos cuentan que en las frías noches de invierno se pueden escuchar los desgarradores gritos del gran guerrero al ver a su amada sin un aliento de vida.

De esa forma fuer como Yupanqui y Kora-llé pasaron a ser parte de los mitos y leyendas chilenas de amor.

4. Los brujos de Salamanca

En el extremo sureste de la región de Coquimbo se encuentra la ciudad de Salamanca. Esta ciudad es conocida por su explotación de cobre de la mina Los Pelambres pero también es famosa debido a sus historias de brujos.

Las leyendas chilenas de este lugar cuentan que en sus alrededores existen cuevas donde los brujos y demonios se reúnen para hacer rituales. Dichas reuniones son conocidas como “aquelarre” y se supone que ningún ser mortal puede asistir a ellas.

Muchos curiosos han sido atraídos a dichas cuevas porque las leyendas también cuentan que en su interior los brujos utilizan únicamente utensilios de oro y plata pero ninguno de los curiosos ha logrado salir de allí con lo que buscaba ya que los utensilios se vuelven de madera al salir de la cueva.

Otros menos afortunados han tratado de seguir a los brujos pero al llegar a la cueva se dan cuenta que no hay ninguna entrada así que deciden esperar por el siguiente brujo, al llegar este lanza un hechizo para que un pase secreto se abra.

Pocos son los valientes o tontos que han logrado salir de esas cuevas después de haber seguido a los brujos por sus entradas secretas.

5. Leyendas chilenas: El Trauco

Regresamos al sur de Chile para contar otra de las leyendas chilenas de “amor” que tanto apasionan a los jóvenes de hoy.

Se dice que en la isla de Chiloé habita un pequeño hombrecito no mayor a 80cm, con un rostro varonil y feo pero con unos ojos amables que usa para ganar la confianza de las jovencitas que se atreven a ir solas al bosque.

Otra de las características de este pequeño demonio es que no tiene pies y siempre está acompañado de un hacha de piedra que utiliza como bastón cuando se enfrenta a una mujer para no asustarla.

El Trauco siempre se encuentra vigilante en el bosque, esperando que cualquier jovencita sea lo bastante ingenua como para entrar al bosque sin estar acompañada. }

Los pobladores cuenta que cuando el Trauco ve a una jovencita sola, este desciende rápidamente de los arboles (los cuales son su hogar) y toca suavemente uno de ellos para llamar la atención de la jovencita.

Cuando la joven escucha el ruido y voltea hacia dicha dirección, el Trauco aprovecha la oportunidad e introduce su aliente en la nariz y boca de la joven para hacerla caer en un sueño profundo.

Al despertar la joven se siente confundida y no recuerdo muy bien todo lo que paso pero a los 9 meses esta da a luz un hijo del Trauco.

Evitando al Trauco

Algunos padres han optado por no dejar ir solas a sus hijas al bosque para evitar que el Trauco se aproveche de la situación, ya que este nunca ataca cuando la joven está acompañada.

Pero cuando este pequeño demonio se enamora de una joven hará hasta lo imposible para conseguir un momento a solas con ella.

Por tal, muchos padres recogen un poco de arena del mar y la dejan al lado de la cama de la joven. Así cuando el Trauco logre ingresar a su habitación, este será atraído por su intenso amor hacia la arena del mar y pasara toda la noche contando los granos que esta contiene.

Al llegar el amanecer, el Trauco ya no podrá perjudicar a la joven porque su familia estará despierta y tendrá que alejarse y esperar por otra oportunidad.

Otro dato curioso sobre este mito chileno es que los únicos que puede matar a esta criatura son sus propios hijos. Estos deben atraparlo y quemarlo. Es la única forma de poder acabar con sus maldades.

6. Leyendas chilenas: La llorona

Una de las leyendas chilenas que desde el norte, pasando por centro y hasta llegar al sur de Chile aterroriza a cualquier persona y advierte las andadas de noche por calles con ríos cerca.

En Chile esta es la leyenda que cuenta la agonía de María de Los Remedio, una mujer elegante y hermosa.

Fue casada a la fuerza con un rico y próspero comerciante, don Gracián Palma de Montes de Oca, celebraron su boda a lo grande.

Luego de casarse vivió en una gran casa, aislada y refugiándose en su jardín lleno de flores.

María asistía a la iglesia cada mañana y percibía la mirada de admiración que le daba Juan de la Cruz, un fontanero de clase baja.

Halagada por esos ojos almendrados que la hacían suspirar, le daban la esperanza en el amor que le había robado el casarse contra su voluntad.

La casa de María requería los servicios de un fontanero.

El primer lampista que llegó no encontró el problema así que recurrieron a los servicios de Juan de la Cruz, con gran alegría llegó a casa de María.

El fontanero fingió no encontrar el problema tan rápido como lo había hecho, así que pasó varios días llegando a casa de María fingiendo trabajar.

Al pasar unos días, Juan confesó saber que ocurría y trabajó en arreglarlo.

María lo invitó a pasar para platicar, en ausencia de su esposo María seguía encontrándose a escondidas con Juan.

Un impulso, hizo que esta leyenda quedará escrita para asustar siempre

Una noche, el amor impulsó a Juan y se deslizó por la ventana del cuarto de la muchacha. Se confesaron su amor hasta impregnarse en la piel el latido de sus corazones hasta el amanecer.

Al pasar unos días, María inició con fuertes dolores de cabeza y náuseas, Juan llevó una curandera del pueblo y les dijo que María estaba embarazada.

Atormentada y asustada por cómo actuaría su esposo, se escondió de todos incluyendo a Juan de la Cruz.

Una fiel sirvienta fue quien atendió el parto.

La noticia que más temía llegó a oídos de María; su esposo estaba por llegar a casa. María con miedo comenzó a correr hasta llegar a un río, donde la luz de la luna y el silencio de la noche fueron testigos que ella sumergió al bebé en las aguas frías del río.

Arrullado por el silencio de la noche, el bebé soltó el último suspiro bajo el agua y la última burbuja de agua anunció su muerte.

En el instante el esbelto y espigado cuerpo de María se transformó por completo, su rostro se desfiguró y la belleza que todos le atribuían se había ido con el acto cometido.

Quedó condenada a andar con la pena de haber perdido a su hijo en las frías aguas y soltó un grito escalofriante ” aaaaay mi hijoooooooo”.

Cuidado porque si la escuchas lejos anda cerca y si el grito es a distancia larga, aún tienes tiempo de correr antes que llegue a tu alrededor.

Esta leyenda chilena tiene muchas variantes

Hay quienes dicen que María tenía tres hijos con su esposo y despilfarraba toda su fortuna, luego de que su prometido muriera se quedó en la quiebra y por la pena del hambre y falta del dinero ahogó a sus hijos en el río.

Sea cual sea la verdadera historia, María quedó condenada a la pena de la muerte más frívola y descabellada, llorando y gritando por su hijo o sus hijos. Además de ganarse un lugar entre los mitos y leyendas chilenas más populares.

7. El Yastay: El protector de los animales

Es hora de las leyendas chilenas del norte del país y una de las más conocidas es la del Yastay. Se dice que esta criatura es hijo de la Pachamama y por encargo de ella debe cuidar los animales silvestres.

En algunas ocasiones el Yastay se presentar como un anciano de barba larga y cuernos como los de un carnero pero en otras ocasiones aparece como un guanaco gigante capaz de escupir fuego por su boca y así ahuyentar a los cazadores.

El desierto de Atacama es uno de los lugares favoritos del Yastay gracias a su mucha diversidad, los guanacos, vicuñas, zorros, guys, chinchilla y los flamencos son solo algunos de los animales que adornan el paisaje del norte.

Los lugareños deben pedir permiso al Yastay cada vez que deben ir a cazar para poder alimentar a sus familias, esto lo hacen a través de ofrendas que el Yastay acepta con todo gusto. Su comida preferida es el cocho (harina de maíz tostado) con harina de quintitaco (algarrobo dulce).

Pero hay de aquel que se atreva ir a cazar sin autorización del Yastay o con otras intenciones que no sean alimentar a su familia, porque tarde o temprano el Yastay aparecerá para cuidar a las manadas de animales y se convertirá en una bestia gigante capaz de escupir fuego acabar con la amenaza.

Sin duda una de las leyendas chilenas del norte con más misticismo y misterio de todas. Pero la moraleja de esta leyenda debe ser ¡respeta a la naturaleza! nunca sabes quien la puede estar cuidando…

8. Leyendas chilenas: El Cuero

Otro de los mitos y leyendas chilenas que se encuentra presente desde el norte hasta el sur de Chile es El Cuero. Una criatura misteriosa que común mente es confundida con una mantarraya pero que sus víctimas han logrado notar la terrible diferencia.

Muchas de las leyendas chilenas vienen del pueblo Mapuche y esta es una de ellas. La leyenda del Cuero se originó durante la conquista. Los ejércitos españoles juraban haber presenciado como una simple mancha en el agua se transformaba en un monstruo aterrador que se alimentaba de cualquier ser vivo.

Se dice que esta criatura tiene la apariencia de la piel de una vaca lanzada a un rio después de haber sido degollada, pero cuando está cerca de una presa, esta se transforma en un ser con largas y afiladas garras y 2 ojos que sobresalen de su cuerpo.

Al atrapar a su victimas con sus poderosas garras, El Cuero las arrastra hacia las profundidades del rio o lago para luego envolverlas con todo su cuerpo y succionarlas hasta la muerte.

Esta criatura se ha visto en varias lagunas de Chile como lo son: Laguna Burato, Laguna Colbun, Laguna Copin, Laguna Nilahue y Laguna Sausalito.

Los Mapuches contaban que la única forma de poder matar a esta criatura era a través de la ayuda de una machi experta, la cual con sus habilidades atraería al Cuero hacia la orilla. Al tenerlo ya a la vista, lo engañaría arrojándole ramas de calafate.

El Cuero, engañado por el poder de la machi, creería que las ramas serían una posible presa; sin embargo, al atacar y apretar con fuerza las ramas, las espinas de las ramas se enterrarían en su cuerpo y el cuero se desgarraría y sangraría hasta morir.

¡Mucho cuidado! cuando vayas a alguna laguna con tus amigos.

9. Leyendas chilenas de amor: La flor de la Añañuca

No todo es misterio y terror en los mitos y leyendas chilenas como lo podrás descubrir en esta historia de amor que forma parte de las leyendas chilenas del norte del país.

Una de las flores típicas de la zona norte de Chile es la Añañuca, una hermosa flor de color rojo de 6 pétalos. Esta flor se encuentra en las partes altas del territorio chileno y es capaz de resistir bajas temperaturas.

Pero además de su belleza, esta flor esconde una leyenda de amor chilena que para muchos es muy triste y para otros es la perfecta historia de dos enamorados.

Cuentan que en tiempos previos a la Independencia, cuando el Monte Patria de la tierra alta todavía se conocía como Monte Rey, habitaba allí una bella joven indígena de nombre Añañuca.

Añañuca era tan hermosa que todos los hombres querían conquistarla, pero nadie lograba adueñarse de su corazón.

Así transcurría el tiempo, hasta que un día, llegó al pueblo un joven minero, gallardo y buen mozo que pasaba por allí en busca de un tesoro.

El joven quedó prendado de la belleza de Añañuca, y lo mismo le sucedió a ella con él. Los dos, perdidamente enamorados, decidieron unir sus vidas y vivieron felices durante un tiempo.

Pero una noche, el joven tuvo un sueño en el que un duende le avisaba del lugar secreto donde se encontraba el tesoro que por tanto tiempo había buscado. A la mañana siguiente, el muchacho partió en su busca, sin avisarle a nadie, ni siquiera a su esposa.

Pero nunca regreso…

Pasaron los días, las semanas, los meses, y el joven minero nunca regresó. Muchos dijeron que el joven cayó en un engaño o que simplemente un accidente lo encontró.

Con un dolor tan inmenso que no le cabía en el pecho por la pérdida de su amado, Añañuca perdió las ganas de vivir y finalmente, también murió.

Un día de incansable y suave lluvia, los pobladores llevaron el cuerpo de la joven a su sepultura en un lugar de la montaña, pues pensaron que ella así lo hubiera querido.

Pero al día siguiente, con la salida del sol, los mismos vecinos amanecieron y presenciaron un sorprendente suceso. El lugar del valle donde había yacido el cuerpo de la joven, estaba ahora cubierto por una abundante capa de hermosísimas flores rojas.

Es por ello que la leyenda asegura que Añañuca se convirtió en flor, como un gesto de amor a su amado, pues de esta manera permanecería siempre cerca de él.

Así fue que se otorgó, a esta bella y desconocida flor, el nombre de Añañuca, flor a la que actualmente también se le conoce como “flor de la sangre”, tanto por su color, como por la tragedia y pérdida de dos jóvenes vidas.

10. El Tue-Tue o Chochón

El Tue-Tue forma parte de las leyendas indígenas chilenas del pueblo Mapuche.

Este pueblo creía que por las noches se podía escuchar un pájaro con cabeza de humano que gritaba a todo pulmón “Tue-Tue” (de ahí su nombre) para traer la desgracia a los pobres desdichados que lo podían escuchar.

Se dice que estos pájaros nunca pueden ser vistos pero si escuchados y que en realidad no son pájaros sino brujos que han decido tomar la forma de un pájaro para traer la desgracia hacia un enemigo.

Algunas personas que han escuchado al Tue-Tue cuentan que lo han invitado a llegar a su casa para almorzar en tono de broma, pero lo que ellos no saben es que los brujos toman muy en cuenta las promesas que se les hacen.

Así que al siguiente día estos se aparecen en su forma humana y exigen el cumplimiento de la promesa que se les hizo. Si la persona rechaza al brujo, este regresa en forma de un Tue-Tue para embrujarlo y posteriormente llevarse su alma.

Así que mucho cuidado con andar haciéndole promesas a los pájaros que escuchas en los bosques de Chile.

Pero no todos son malas noticias, la leyenda cuenta de que si tú o alguien de tu familia están siendo molestados por este tipo de pájaro debe de encender una fogata y quemar sal. El olor de la sal y el fuego ahuyentara a cualquier brujo o Tue-Tue.

11. El Invunche

El Invunche es una de las leyendas chilenas menos conocidas en todo Chile. Y no es para menos ya que su historia no es una de las más bonitas.

Chile es famoso por su sin fin de historias de brujos y no sería extraño que dichos brujos tuvieran un gran guardián que les permitiera llevar sus reuniones en sus cuevas sin interrupciones. Eso, es exactamente el Invunche, una criatura abominable que protege a los brujos.

Se dice que para crear este tipo de creatura, los brujos chilenos deben escoger a un primogénito de alguna familia y robarlo de los brazos de sus madres. Luego, a través ce unos ritos transformaran al pobre bebe en la temible creatura.

Muchos cuentan que el Invunche tiene una pierna pegada a su espalda y que muchas veces camina con tres piernas (1 pierna y sus 2 brazos) para aterrorizar a sus víctimas. Esta criatura no habla y únicamente se limita a realizar sonidos horripilantes.

Además de servir como protector para los brujos, a veces el Invunche es utilizado para llevar acabo las venganzas de los brujos contra distintos pueblos que de una u otra forma los han ofendido.

Sin duda una de las leyendas chilenas cortas de terror más espeluznante de todas.

12. Leyendas chilenas: La Calchona

Una de las leyendas chilenas de la zona central más famosa es La Calchona. Una criatura en forma de oveja que según cuentan una vez fue una bruja que por un accidente quedo atrapada en dicho cuerpo de oveja.

La historia comienza en una fría noche de invierno cuando una bruja que vivía felizmente con su marido y 3 hijos decidió crear unos ungüentos para poder transformar en una oveja y vagar por los bosques en las madrugadas para hacer lo quisiera.

Antes del amanecer, la bruja siempre regresaba a casa para untarse los ungüentos mágicos que había creado y así volver a su forma humana sin que su familia lo notara.

Pero una ocasión, mientras ella no estaba en casa. Sus hijos encontraron los ungüentos mágicos y decidieron probarlos por sí mismos. Inmódicamente se transformaron en pequeños terneritos y salieron corriendo hacia el bosque.

Cuando el padre de los niños se percató que estos no estaban por ninguna parte, comenzó a buscar en la habitación de su esposa, donde encontró los ungüentos. Aterrado por haber descubierto que su esposa era una bruja, tomo todos los ungüentos y los tiro al rio.

Al día siguiente, cuando la bruja regreso a su hogar descubrió que sus ungüentos ya no estaban y tampoco su familia.

La leyenda cuenta, que desde ese entonces se encuentra en búsqueda de sus ungüentos para regresar a su forma humana y por fin volver a ver a su familia.

Por eso, cuando en las noches los campesinos sienten balar una oveja que vaga sola por los campos, ellos saben que se trataría de la mítica calchona y como tradición se acostumbraría dejarle un plato con comida para que se alimente.

13. El pueblo de Tololo Pampa

¿A quién no le gustaría encontrar un tesoro en medio del desierto?

Es por ello que miles de mineros y otros aventureros se han aventurado a los desiertos de Chile motivados por historias de grandes riquezas ocultas y esperando a ser descubiertas.

Pero son estos aventureros los que han tenido la desgraciada de toparse con el pueblo fantasma de Tololo Pampa.

Muchos dicen que este pueblo fantasma se encuentra ubicado cerca del Canto de Agua, en los Llanos de Challe y que su origen se remonta a un antiguo poblado que fue cubierto por un aluvión, cuyos habitantes serian almas en pena, continuando su vida normal.

Las pocas personas que han escapado de este pueblo fantasma cuentan que cuando ellos estaban perdidos y a punto de morir en el desierto se encontraron inesperadamente dentro de un pueblo muy alegre, repleto de personas bailando y con muchas luces.

Dicen que en dicho pueblo habita una hermosa princesa custodiada por un gran minero conocido como “Patas largas” y que este siempre se encuentra en búsqueda de tesoros.

La princesa siempre trata de quitarles todas sus riquezas a los pobres aventureros que entran a su pueblo y los que logra atrapar son condenados a vivir en Tololo Pampa por toda la eternidad.

Pero los afortunados en escapar, despiertan sobre una roca en el desierto bajo el fuerte sol, sin más que solo los recuerdos del pueblo fantasma y su avariciosa princesa.

Algunos cuentan que para probar la existencia de dicho pueblo, han comprado obsequios para sus esposas, los cuales no desaparecen cuando el pueblo fantasma de Tololo Pampa lo hace.

Otro rumor de este mito chileno es que si observar al “Patas largas” buscando un tesoro, tendrás muchas prosperidades en tu vida.

14. Leyendas chilenas del norte: La Tirana

Regresamos al norte de Chile para contar otra de las leyendas chilenas de amor que tanto nos gustan y en esta ocasión es el turno de La Tirana.

Hace mucho tiempo, cuando los españoles llegaron a Chile para conquistar todas sus tierras. Estos encarcelaron a varios de los primeros pobladores de este país. Entre sus cautivos se encontraba una joven princesa inca llamada Ñusta Huillac.

La princesa a ver a su pueblo ser tratado tan mal por los invasores, organizo su escape y se levantó en armas contra los españoles.

Se cuenta que la princesa cazaba a los españoles sin piedad hasta hacerlos retroceder y regresar por donde habían venido. Así paso por mucho tiempo, defendiendo a su pueblo hasta que un día conoció a un elegante explorador portugués llamado Vasco de Almeida.

La princesa y el explorador se enamoraron al instante y juraron estar juntos por toda la eternidad. El explorador convenció a la princesa de convertirse al cristianismo, a lo cual la princesa accedió.

Cuando los inca se enteraron lo tomaron como un traición hacia su pueblo y decidieron matarla con su enamorado con una lluvia de flechas.

La leyenda cuenta, que donde los 2 enamorados yacían muertos cubiertos de flechas, creció una pequeña cruz de madera. Dicha cruz fue encontrada por el misionero Antonio Rendón. Quien en honor a los enamorados mandó a construir en el lugar una iglesia dedicada a Nuestra Señora del Carmen de la Tirana.

Desde entonces, cada 16 de julio se celebra en el norte de Chile, con cantos y animados bailes, la Fiesta de la Tirana en honor de la princesa inca que lo dio todo por su pueblo y por el amor que sentía por el explorador portugués.

15. El Alicanto

Llegamos al final de nuestro listado de 15 mitos y leyendas chilenas, pero antes de despedirnos no podíamos dejar de compartir una de las leyendas más intrigantes del norte de Chile: El Alicanto.

El desierto de Atacama, el más árido del mundo es uno de los lugares favoritos para los mineros y aventureros que han sido contagiados por la fiebre del oro.

Muchas de estas personas se embarcan hacían una ventura en el desierto con la esperanza de encontrar fama y fortuna enterrada en las áridas tierras del desierto. Algunos lo logran pero otros no.

Algunos de estos exploradores han contado que han visto un ave hecha totalmente de oro y piedras preciosas, con un brillo tan fuerte que si la observas por mucho tiempo es probable que te deje ciego. A dicha ave la han llamado como El Alicanto.

La leyenda cuenta que el Alicanto conoce las intenciones en los corazones de los hombres y si estos están gobernados por la avaricia los guiara por caminos desconocidos en el desierto y los dejara a su suerte.

Pero si el corazón del hombre aún no ha sido envenado por la avaricia, el Alicanto lo llevara hacia su guarida donde este encontrara infinidad de piezas de oro y plata que esta ave ha ido recolectando durante toda su vida.

Muchos dicen que su plumaje es dorado y brillante porque se alimenta de oro pero que si en alguna ocasión comenzar a alimentar se plata su plumaje cambiaria a dicho color también.

Cierto o no, muchos se aventuran hoy en día al desierto con la única esperanza de ver al Alicanto y que este no encuentre avaricia en sus corazones.

¡Esperamos hayas disfrutado de los mitos y leyendas chilenas más aterradoras y misteriosas!